lunes, 5 de diciembre de 2011

III CONGRESO Leer.es MOTIVOS PARA LEER. COMPROMISO CON LA LECTURA

Durante los días 25, 26 y 27 de noviembre se ha celebrado en Madrid el III Congreso Leer.es con el lema “Motivos para leer. Compromiso con la lectura.” La verdad es que ha sido muy interesante asistir a un Congreso de estas características ya que el nivel de las intervenciones ha sido elevado, salvo la del experto finlandés que resultó…flojita.
Durante el Congreso se han analizado distintas estrategias para fomentar la capacidad de comprensión lectora de nuestro alumnado, bastante deficiente por cierto, tal como se encargó de recordarnos el profesor finlandés. En este sentido destaca la presentación de la nueva Webcast www.leer.es, donde se recogen múltiples experiencias y materiales para facilitar este objetivo.
Se habló también de la importancia de las bibliotecas escolares en la vida de los centros y de la importancia que reviste su evaluación. Se recordó cómo lo fundamental es contar en los centros con un equipo integrado de docentes que persigan la calidad educativa, más que con algunos pocos profesores excelentes. Se mencionó un estudio, de 2010, “Bibliotecas escolares entre comillas”, que analiza el funcionamiento de varios casos concretos de bibliotecas.
Como broche final, se organizó una tertulia sobre Lectura y Medios, donde la escritora Ángeles Caso mantuvo que toda la literatura no tiene obviamente la misma calidad, con lo que si bien, en las primeras etapas, la lectura de evasión puede ser un medio para estimular la lectura no hay que renunciar, posteriormente, a apostar por lecturas de mayor calidad, aunque sepamos que requieran un ESFUERZO y que por tanto puedan ser rechazadas a priori por los alumnos. Todo esto sin olvidar, por supuesto, que se han cometido a veces muchos errores al recomendar a los alumnos lecturas claramente inapropiadas, pe La Celestina en castellano antiguo en los primeros años, lo que ha provocado un rechazo visceral hacia la lectura.
En suma, un estimulante Congreso donde se ha demostrado que, a pesar de la crisis, hay muchos compañeros que siguen persiguiendo la utopía, sin olvidar la realidad, y buscan nuevas formas de hacer las cosas y de trabajar ilusionando al alumnado.

martes, 22 de noviembre de 2011

3) BUSCAR NUEVAS FORMAS DE HACER LAS COSAS: MADURAR, SER CRÍTICOS Y TRABAJAR LA CREATIVIDAD

Los primeros fríos se han demorado, pero por fin han hecho acto de presencia y ya no parece muy adecuado mantener estos Apuntes Veraniegos sobre la crisis. No obstante, la situación sigue igual o, si se me permite, estamos un poco más cerca del fantasma de la recesión. Acabamos de tener, o de padecer, unas Elecciones Generales, pero el resultado no ha tranquilizado a los insaciables mercados, seres fantasmales ellos mismos que manejan los hilos de los decadentes Estados.
Mis alumnos, algunos convertidos en fieles seguidores, cosa que agradezco, comienzan a inquietarse y me preguntan sobre el oscuro futuro que les espera. Yo les contesto que el panorama no es alentador, pero que en épocas de crisis es cuando afloran las ideas originales, cuando los espíritus entumecidos por la comodidad se espabilan, cuando la gente empieza a pensar y a cuestionarse si vale la pena seguirse dejando manipular. Tenéis un futuro difícil, unas previsibles condiciones económicas peores que las de vuestros padres, pero también tenéis la posibilidad de despertar y de ejercer la crítica. No os va a ser fácil porque estáis sobreprotegidos y hasta ahora eso os ha parecido cómodo y placentero, el paraguas de los padres y del Estado del bienestar se va a ir cerrando con rapidez y os encontraréis posiblemente solos y angustiados.
Ante todo esto, no os desploméis y trabajad con intensidad, no escuchéis sermones de los que os quieren manejar, estudiad y prepararos, madurad porque de lo contrario lo tendréis que hacer de forma muy traumática y sobre todo pensad que hay otra forma de hacer las cosas y que no por poseer más bibelots se es más feliz. Al contrario, el que basa su identidad en el consumismo desaforado no es más que un pelele, una piedra fácil de manejar. Madurad por favor y dejad los sueños peterpanescos, no podéis seguid comportándoos como niños irresponsables. Madurad de una vez, que nadie va a venir a resolveros las cosas y menos, por cierto, los políticos profesionales o los encantadores de serpientes.
PS: Niño Becerra ha publicado un nuevo libro: Más allá del Crash (Los libros del lince, 2011), muy recomendable, catastrofista según algunos, lúcido según otros a los que me uno.

viernes, 26 de agosto de 2011

APUNTES VERANIEGOS: SOLUCIONES A LA CRISIS

2) RECUPERAR LOS VALORES DEL ESFUERZO Y LA AUSTERIDAD


Ante los recientes sucesos en el Reino Unido, el primer ministro David Cameron ha denunciado con contundencia la profunda crisis de valores que afecta a una buena parte de los jóvenes. En particular, ha dicho que estamos frente a una “…falta total de responsabilidad, falta de una adecuada crianza de los hijos, la falta de educación adecuada, la falta de ética, la falta de moral adecuada. Eso es lo que tenemos que cambiar. No hay un detonante que pueda cambiar estas cosas. Se trata de los padres, se trata de la disciplina en las escuelas, se trata de asegurarse de que tenemos un sistema de bienestar que no recompensa la inactividad. Es todas esas cosas”.
El mismo Papa durante las JMJ de Madrid ha criticado también la ausencia de referentes y de valores que afecta a muchos jóvenes.
Tanto Cameron como el Papa actual preconizan la necesidad de inculcar unos principios sólidos de conducta a los jóvenes. ¿Cuáles? Posiblemente la visión de los valores a inculcar sea muy diferente para cada uno de ellos. Pero el problema no radica solamente en qué principios hay que transmitir sino si esto es posible en una sociedad marcada en gran medida por el hedonismo y la satisfacción inmediata.
Se avecinan tiempos duros, la crisis económica no ha hecho más que empezar (aconsejable el libro de Santiago Niño Becerra, El crash del 2010), la generación de jóvenes actual va a vivir bastante peor que la de sus padres, y en todo ese contexto les queremos exigir austeridad y sacrificio cuando la esencia misma de nuestro sistema capitalista consiste precisamente en todo lo contrario. (Me refiero obviamente al capitalismo actual, al turbocapitalismo, no al capitalismo de las primeras etapas)
Pienso que estamos ante unas reflexiones muy hipócritas o, en el mejor de los casos, muy ingenuas: No se trata únicamente de que los jóvenes aprendan a vivir bajo los valores del sacrificio y la austeridad, sino que para ello los adultos, los padres, profesores y en general los que tenemos algún predicamento sobre los jóvenes debemos recuperar primero esos valores porque difícilmente se puede transmitir aquello que no se practica con el ejemplo.
Mucho me temo que este cambio vendrá dado por la fuerza imparable de los acontecimientos, por la recesión galopante y el derrumbe del Estado del Bienestar, espejismo fugaz nunca suficientemente valorado ni defendido. Mucho me temo también que los adultos seguirán criminalizando a los jóvenes sin reconocer la gran responsabilidad que corresponde a una sociedad caótica y egoísta.
Tiempos interesantes en suma, aunque, como dice el Nobel Paul Krugman, esta afirmación haya que entenderla “en el peor de los sentidos”

martes, 9 de agosto de 2011

APUNTES VERANIEGOS: SOLUCIONES A LA CRISIS

1) DEJAR DE MIMAR Y ENGAÑAR A NUESTROS ALUMNOS: NO SE LO MERECEN

Me he dado cuenta de que tengo este Blog del profesor quemado bastante abandonado, así que me permito dirigirme a vosotros, lectores desconocidos y espero benevolentes, para compartir algunas reflexiones que me inquietan. Ya me diréis, si os parece, qué pensáis sobre las mismas.
Yo no se vosotros si tenéis también una sensación de desasosiego cada vez que veis los noticiarios o leéis la prensa, pero los datos económicos son para desmoralizar: que si baja el IBEX, que si sube la prima de riesgo, que si el paro se dispara…. Desolador panorama sobre todo cuando los políticos ponen la guinda diciendo que no hay recesión, que las cosas van mejorando, que la situación es preocupante pero tampoco es grave…Y me estoy refiriendo a políticos de todo signo, tanto conservadores como supuestamente progresistas.
Ante todas estas declaraciones y ante todo este alud de datos económicos, me gustaría compartir una conversación que tuve hace ahora cuatro años, antes de la crisis, con uno de mis alumnos: un chaval de los que enloquecen al profesorado con sus comportamientos disruptivos, pero que en el fondo, en las distancias cortas, no era tan horrible, casi un poco ingenuo, ya que se sinceró conmigo, en un momento en que estábamos solos en la sala de guardia en que permanecía expulsado por una nueva tropelía. Le pregunté que qué pensaba sobre su futuro y con sinceridad pasmosa me dijo que para qué tenía que estudiar cuando su padre, analfabeto, dirigiendo una cuadrilla de trabajadores en la construcción ganaba mucho más que cualquiera de nosotros. Ante esto, le comenté que las cosas podían cambiar, como así ha sido, y que la cultura permanece, que ese activo queda para siempre, etc. Me miró con estupor y comprendí que mis argumentos no le podían convencer.
Pues bien, hemos llegado al momento en que los padres de este chaval se han dado ya cuenta de que estamos en recesión, de que no hay trabajo. Pero nuestros políticos no quieren aceptar el mensaje y si no lo hacen los políticos mucho menos lo van a hacer chavales mimados e hiperprotegidos como los de la anécdota que os cuento. Y es que la realidad es tozuda y siempre se impone. SE HA ACABADO EL SUEÑO DEL PROGRESO INDEFINIDO QUE NO PASA FACTURA, EL SUEÑO ESPECULATIVO Y LÚDICO. HAY QUE CAMBIAR EL CHIP. Los valores del esfuerzo, de la austeridad, del trabajo paciente, valores en que se basaba el capitalismo de los primeros tiempos, van a ser nuevamente necesarios. Lo que me preocupa son estos alumnos que solo tienen como referente una sociedad marcada por el consumismo desenfrenado, unos alumnos caprichosos y consentidos por unos padres que no se atreven a contrariarles. Decirles que estamos inmersos en una profunda crisis y que tendrán que esforzarse mucho para poder sobrevivir es algo doloroso pero necesario. Si les seguimos protegiendo, como los políticos quieren hacer con la sociedad, estaremos negándoles la posibilidad de salir de la crisis, estaremos insultándoles al pensar que no pueden digerir las cosas. La realidad es dura, pero no les tomemos por imbéciles. No se lo merecen